sábado, 26 de septiembre de 2009
EXPLOSIO LUNAR
Publicado el 17 de Octubre de 2005 en Historias de la ciencia por omalaled
Tiempo aproximado de lectura: 3 minutos y 46 segundos
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Los descubrimientos no han sido todos gracias a la simple aplicación del método científico, de la idea correcta y la imaginación. Hay muchos de ellos que han sido por pura casualidad. Sin comerlo ni beberlo te encuentras de golpe con un gran descubrimiento, incluso con el Nobel. A esta circunstancia se le llama “serendipia”. Es una palabra que la RAE a fecha de hoy todavía no ha aceptado pero en inglés existe el término “serendipity”. Pues bien, nuestra historia de hoy tiene que ver con una de esas “serendipias”.
Imaginemos que estamos inmersos en una explosión, pero no viéndola desde fuera como acostumbramos a hacer, sino desde dentro de la misma. Notaríamos que recibimos calor y presión (en suma, energía) de todas partes. No importaría la dirección y sentido en que miráramos: veríamos energía. Estaríamos por tanto inmersos también en las consecuencias de dicha explosión y podríamos medir la energía perfectamente. Pues bien, ¿no es razonable pensar que si hubo una fuerte explosión hace unos 15.000 millones de años en la que estuvo implicado todo el Universo todavía estaríamos recibiendo parte de esa energía? Si es así, ¿cómo podríamos detectarla?. De ser cierto sería una evidencia a favor del Big Bang.
Eso es lo que pensaron en 1948 Ralph Alpher y Robert Herman. Otro físico, George Gamow, hizo cálculos y estimó si era realmente así debía haber una radiación electromagnética equivalente a una temperatura entre 0 y 5 grados absolutos (o sea, entre -273 y -268 grados centígrados). Pero nadie se molestó en buscar señales. Alpher y Herman discutieron efectuar el experimento y la mayoría de los astrónomos dedicados a la observación desconocían la predicción porque jamás habían visto el artículo, así que cayó en el olvido.
Robert Dicke, un físico de la Universidad de Princeton, había detectado realmente la radiación cósmica de fondo dos años antes de que fuera predicha trabajando con un equipo especial de medición que él mismo había desarrollado, Dicke descubrió una radiación con una temperatura algo por debajo de los veinte grados Kelvin que era el límite de la precisión de sus instrumentos. Informó de su descubrimiento en un ensayo que apareció en la Physical Review pero, no teniendo ninguna explicación para el fenómeno, también se olvidó.
Dos décadas más tarde, Dicke empezó a trabajar en nuevos modelos cosmológicos y pidió a un compañero suyo James Peebles que viera lo que podía conseguir en términos de números precisos. Volvió con una cifra de diez grados Kelvin (-263 grados centígrados).
Cambiamos totalmente de escenario. Dos jóvenes físicos investigadores de los laboratorios Bell, Arno Penzias y Robert Wilson, utilizaban una curiosa antena tipo cuerno de alta sensibilidad para medir los niveles de ruido que emite el interior de nuestra galaxia y que pudiera contaminar e interferir la recepción de señales del satélite de comunicaciones Echo I.
Tenían un problema. Estaban detectando ruido de señal. No importaba si era de día o de noche, ni la estación del año el ruido provenía de todas las direcciones del cielo. Manifestaba una temperatura equivalente a 3° Kelvin (-270° C). Fueron incapaces de eliminarla de su sistema. Especularon que la señal podía estar causada por unas palomas que habían dejado allí sus excrementos. Pero después de eliminar lo que llamaron “blanco material dieléctrico” la señal persistía.
Penzias, por casualidad, mencionó el problema a un radioastrónomo, Bernard Burke, del MIT que había oído decir a Dicke y Peebles que si la teoría del Big Bang era correcta, debía perdurar una radiación fósil de la primitiva explosión cósmica que, ahora enfriada, conservaría una temperatura residual de unos 10° K. Quizá, sugirió Burke, los dos grupos debieran entrar en contacto. En abril de 1965, estando Dicke en su despacho universitario junto a sus colegas Peebles, Wilkinson y Roll, sonó el teléfono y contestó. Los tres científicos le oyeron pronunciar palabras como “radiación de fondo” y “tres Kelvin”. Luego Dicke se despidió y colgó, se volvió a sus colegas y les dijo: “Se nos han adelantado”.
Penzias y Wilson no podían comprender por qué los muchachos de Princeton se mostraban tan excitados acerca de su ruido de señal de tres grados Kelvin. A petición de Dicke, Penzias y Wilson escribieron un informe que fue publicado en el número de julio de 1965 del Astrophysical Journal. El ensayo no atribuía ningún significado al descubrimiento, y se limitaba a enviar a los lectores a otro artículo de Princeton que aparecía en el mismo número y que ofrecía una posible explicación. Ninguno de los dos artículos mencionaba los ensayos clave de 1948 habían predicho la existencia de la radiación de fondo, una falta de reconocimiento que, comprensiblemente, molestó a Gamow y a otros.
Pero fijaos en la casualidad (o la serendipia): estás trabajando para detectar una cosa y te encuentras con otra. Arno Penzias y Robert Wilson se llevaron el Nobel por el descubrimiento de la radiación de fondo.
La parte divertida de esta historia es que a los astrofísicos que fueron a comprobar con sus propios ojos esa radiación a los laboratorios les gusta recordar que dijeron (perdón por la expresión, pero cito palabras textuales):
Eso que estamos viendo es una mierda de paloma o la creación del Universo.
Fuentes: “El momento de la creación”, James S. Trefil
http://www.cienciateca.com/ctsserend.html
http://www.100cia.com/divulgacion/40_anos_de_la_serendipia_penzias_wilson_443.html
http://www.astrocosmo.cl/h-foton/h-foton-09_01.htm
http://www.uv.es/metode/anuario2000/134_2000.html
Hay 16 comentarios a 'Una mierda de paloma o la creación del Universo'
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1.
#1.- Enviado por: AntonioT
El día 17 de Octubre de 2005 a las 14:54
Conclusión: la creación del universo es una mierda de paloma. ;oD
Por tanto, si la mierda es de elefante ¿qué se creará? XD
Perdón por tanta escatología, no lo pude evitar.
2.
#2.- Enviado por: Voltaire-
El día 17 de Octubre de 2005 a las 22:56
Ho vaig veure a un documental sobre els origens de l’univers. Uns buscant la manera de detectar el senyal de la explosió inicial mentre altres intentaven treure el soroll de fons d’una antena psicodèlica XD
Al cap i a la fi el que importa és que sempre hi ha gent indagant tot i que de vegades no saben el què han trobat.
Per cert, el tal George Gamow té llibres divulgatius de física molt bons.
3.
#3.- Enviado por: omalaled
El día 18 de Octubre de 2005 a las 10:25
AntonioT: miedo me da pensar si hubiera sido de elefante …
Voltaire-: sí, és molt bonica tota aquesta part de cosmologia i el George Gamow no només va ser un gran divulgador sino que va ser un pioner de tot això. Un crak el paio.
Salut!!
4.
#4.- Enviado por: Nelor
El día 18 de Octubre de 2005 a las 11:21
Lo cierto es que de casualidades está llena la historia de la ciencia. Mirad si no a Pasteur y su penicilina, no fué más que una contaminación del hongo Penicilium en una placa que contenía bacterias.
Por otro lado, y desde mi opinión, creo que intentar emular las palabras del inglés, en este caso Serendipity, no creo que sea necesario cuando tenemos muchas palabras y frases para ello: azar, casualidad, golpe de suerte, potra, etc.
Muy buena la historia.
Un saludo.
Nelor
5.
#5.- Enviado por: omalaled
El día 18 de Octubre de 2005 a las 12:01
Muchas gracias, Nelor.
Respecto a la palabra “serenditity” es cierto que tenemos muchos sinónimos, pero cuando se habla de serendipity entendemos hacer un descubrimiento por pura casualidad. La suerte, azar y otras hacen referencia a cualquier tipo de situación. Por ejemplo, todos los sinónimos de suerte coinicden en serlo cuando te toca la lotería, pero no sería una serenditiy, ya que sólo se aplica cuando ello conlleva un descubrimiento. En inglés las definiciones que dan son:
1. The faculty of making fortunate discoveries by accident.
2. The fact or occurrence of such discoveries.
3. An instance of making such a discovery.
Siempre implican un descubrimiento. No he encontrado ninguna palabra en castellano (o catalán) que tenga ese significado tan particular.
No obstante, disto mucho de ser un buen lingüista y mi opinión no es muy válida en estos temas.
Saludos
6.
#6.- Enviado por: Holbach
El día 18 de Octubre de 2005 a las 13:05
No soy partidario del vocablo “serendipia”. Identificamos los azares aforturnados mediante palabras como “chiripa” o “carambola”, pero encuentro superfluo introducir una palabra nueva solo para distinguir los descubrimientos fortuitos del resto de casualidades favorables.
7.
#7.- Enviado por: omalaled
El día 18 de Octubre de 2005 a las 13:10
Hola, Holbach.
Tampoco debe traducirse por una palabra. También podría utilizarse una expresión como “la suerte del descubrimiento” (insisto, en lengua soy muy malo).
Saludos
8.
#8.- Enviado por: omalaled
El día 18 de Octubre de 2005 a las 13:25
Parece que se usa la palabra “serendipidad” y lo he visto en el google aquí.
Hay varios enlaces que hablan de ello.
Saludos
9.
#9.- Enviado por: Nelor
El día 18 de Octubre de 2005 a las 16:27
Bueno, siento haber abierto una pequeña discusión lingüistica cuando el blog es de ciencia. En todo caso parece que ya tenemos claro el significado de serendipity y que para su traducción al castellano o catalán hace falta echar mano de una expresión o una frase.
En cuanto a descubrimientos por chiripa o carambola como apuntaba Holbach, ¿alguien se acuerda de algunos más? Se que hay cientos de ellos, aunque unos tienen más chiripa que otros. Y paradojicamente, muchas veces salen a partir de experimentos fallidos.
Saludos,
Nelor
10.
#10.- Enviado por: omalaled
El día 18 de Octubre de 2005 a las 16:50
En absoluto, Nelor. Es bueno que se abran debates donde cada uno aporte diferentes puntos de vista y puedan compartirse.
Respecto a lo que preguntas hay muchos descubrimientos de estos reflejados en un libro titulado precisamente “Serendipia” de Royston M. Roberts.
Tengo ese libro aunque sólo lo he mirado por encima. Hay muchos en el campo de la química (de la que soy un absoluto analfabeto) pero hay otros muy divertidos como la del post-it. De esta me reservo una historia.
Saludos
11.
#11.- Enviado por: Conusmidor irritado
El día 19 de Octubre de 2005 a las 08:41
Muy interesante como siempre.
12.
#12.- Enviado por: omalaled
El día 19 de Octubre de 2005 a las 10:48
Muchas gracias.
Saludos.
13.
#13.- Enviado por: Maxi
El día 10 de Noviembre de 2005 a las 20:05
La verdad que llamar a un descubrimiento de carambola “serendipia” o “serendipidad” es muy complicado, no es una palabra amigable (en mi opinión).
Prefiero como dijo Holbach lo de llamarlo como una carambola, o un descubrimiento “a lo homero” :)
saludos
maxi
14.
#14.- Enviado por: omalaled
El día 11 de Noviembre de 2005 a las 10:13
Estoy de acuerdo.
Saludos
15.
#15.- Enviado por: alfonso
El día 17 de Noviembre de 2005 a las 00:09
me parece que chiripa (fonéticamente parecida a serendipity) o carambola están incluidas en el diccionario de la RAE y expresan bien el sentido de lo expuesto.
Serendipia o derivados no están aceptados por la RAE.
Salu2.
16.
#16.- Enviado por: omalaled
El día 17 de Noviembre de 2005 a las 10:06
Pues nada, por unanimidad desechamos “serendipity” y derivados :)
Salud!!
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El día 17 de Noviembre de 2005 a las 00:09
me parece que chiripa (fonéticamente parecida a serendipity) o